jueves, 29 de enero de 2009

El misterio de...

Ahí estaba yo, querido lector, hambrienta después de vegetar horas frente a la computadora, cuando mi estómago comenzó a dar lata.
Fuí a la cocina para ver que podía saciar mi hambre-antojo. Algo dulce. Algo panoso-carbohidratoso que me llenara el hueco de la panza y me complaciera el paladar...
Pan tostado y mermelada mmm y para no verme muy chatarrera -aún consumiendo más azúcar- decidí que una fruta era un buen complemento. Una rica y jugosa pera madura mmm...
Terminé de untar la mermelada y comencé a comer el pan tostado. Una vez terminado quise lavar la fruta cuando derrepente...

WTF!!! Ahí estaba mi pera, MORDIDA!!
No se me ocurría quién podía haber hecho semejante barbaridad, morder una fruta y regresarla al frutero. La mordida era reciente pues aún no se oxidaba.. Mi abuela? No ela no haría eso... Pensé mmm estos dientes chuecos y mordida pequeña podrían ser de...
Ahí fue que la confusión y el miedo hicieron presa de mí. Esa mordida irregular y pequeña - aún incrédula, pensé podía ser de algún(a) mocoso(a) de la familia- era por demás demás conocida por mí: La veo marcando vasos de unicel en fiestas y reuniones..
Sí, la mordida... era MÍA!!! -Música de suspenso-

No podía entenderlo
Si sólo la había tomado del frutero y sostenido, para después hacerla a un lado para untar mermelada. En qué momento???? Realmente me espanté

Posesión? Personalidad múltiple? Desorden nervioso? Abducción extraterrestre? (juro que si pensé todo esto)
A dónde se fueron esos segundos de mi vida??
Aún estupefacta procedí a amoldar mis dientes a la mordida... Encajaban perfecto. Despúes de hacer marcas arriba y abajo de parte de la mordida concluí: Definitivamente YO la mordí...

Cuándo?! Le dí la vuelta a la pera y le di una mordida similar a la dejada, igual incompleta -la parte superior no era una con la inferior, una mordidita- Masticando y esforzando mi mente tuve una tranquilizadora sensación de Deja vu
Nunca un Deja vu había sido tan tranquilizante, de hecho ni siquiera tranquilizante en absoluto.
Aún no sé que pasa con mi memoria a corto plazo, solo sé que me desvelaré menos, fumaré menos y cuidaré más a mis queridas neuronas más.

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