jueves, 30 de agosto de 2007

Me gustan los días lluviosos

¿Será porque son más frescos? ¿Por qué no hay sol? ¿Por que me encanta mojarme bajo la lluvia? o ¿Será solo por el gusto semi-amargo de la nostalgia?

En realidad me gustan estos días porque me puedo deprimir a gusto... no hay nada mejor para tener el pretexto de tirarse a gusto en el sillón sin molestias ni interrupciones y enmarcar un día de depresión...El motivo ?
a)No estoy donde me gustaría estar (DF)
b) ni con quien me gustaría estar(MHPR)
c) ni haciendo lo que me gustaría hacer (estudiar Ciencias Políticas en la UNAM)
Básicamente pura frustración.
Oh sí... resulta que después de más de un año de habernos conocido en un concierto de locura (algún día les contaré esa historia) yo sigo aquí y ella sigue allá (obvio, ya que fue allá donde nos conocimos) y así será por un tiempo al menos...Y bien... ¿Qué he hecho yo para cambiar algo desde entonces? Bueno he presentado y acreditado la materia de prepa abierta que me hacía falta, he practicamente renunciado a mi deporte acá, cosa que fue bastante dificil para mí(y que conste que no es reproche, solo dejaba clara mi dependencia emocional a la actividad y mi miedo al cambio) y en general a las cosas que me ataban en ese momento. Pero estúdidamente sali de Guatemala para entrar en Guatepeor... Tomé un trabajo que parecía maravilloso (y tal vez lo fue al principio) pero ahora sinceramente es un poco infernal a veces (eso sin mencionar que no me han pagado hace más de un mes) Eso suena como el pretexto ideal para mandar todo a la goma... pero mi pedazo de conciencia me hace sentir muy culpable al respecto, ya que odio dejar las cosas tiradas (aunque indudablemente lo hago) sobre todo por que en este caso se pude malinterpretar como un: solo-le-intereso-mientras-hubo dinero lo cual es falso. Me interesa pero me pudre no encontrar ningún eco motivador... De todos modos nunca me plantee quedarme en realidad...¿Qué me impide avanzar ahora? Pues en primer lugar (como ya mencioné antes)no me han pagado y no puedo comprar un telefóno para reponer el que perdí en mi último viaje para poder hacer las mil ochomil llamadas que solía hacerle a ella al día (gracias a mi maravilloso plan de telefonía celular) y estar,digamos, en contacto.No es precisamente alturista, pero definitivamente es una NECESIDAD, ya que parte de mi salud mental y mi estabilidad emocional dependen de ello (suplico a ud. lector no se ría)Suena estúpido (o bueno en estos tiempos es difícil decir...) pero el hecho es que NECESITO mi línea!!

Así las cosas hasta ahora querido lector, espero poder tener mejores noticias mañana.

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